Traslado: de la pluma a las puntas

Boston Ballet in Black and White by Gene Schiavone, courtesy of Boston Ballet.
Para tratar este tema es importante recalcar que cuando se lanzó la obra de ballet inspirada en la obra literaria de Cervantes, el ballet se encontraba en su época dorada. Fue  a finales del siglo XVII inicios del XVIII que las más hermosas y representativas obras, hoy conocidas como clásicos fueron creadas y puestas por primera vez en escena, como es el caso del ballet de Cascanueces, El lago de los cisnes o Giselle, entre otros.

Por otro lado, en contraste, cuando el estreno del ballet de Don Quijote tuvo lugar en el Teatro de Bolshoi en Moscú la obra maestra ya llevaba un poco más de dos siglos circulando y llegándole a más lectores. Además como se expuso anteriormente esta novela obtuvo gran popularidad desde sus inicios y esto por mérito propio del contenido y forma de la obra, tanto que hoy se considera como obra ejemplar del canon.

Por esta razón el la expresión artística que realmente se encontraba en vulnerabilidad de ser modificada sería aquella más joven, y no solo hablando del ballet de tres actos sino del ballet como tal, como forma de expresión, como conjunto de movimientos. Esto sin demeritar en ningún momento la una o la otra.

Cada expresión artística es considerada como una obra original, la obra literaria es la originaria, pero a partir de esta se han generado un sin fin de representaciones que son igualmente obras artísticas propias y que tienen la impronta de su autor. Por lo tanto son igual de valiosas a la original, cada una con el toque especial y respetando los fundamentos del arte madre.